Messi inicia otra Copa América. Hoy 14h00 de Ecuador
Brasil (AS).- Messi lo tiene claro: «Nos dieron vida y hay que aprovecharla. Ahora empieza otra Copa«. Hoy Leo regresa tras cinco años al mítico Maracaná para buscar con Argentina la semifinal de la Copa América (sigue el partido en directo en As.com). Al frente tendrá a la difícil selección de Venezuela, que tiene la gran ilusión de dar unos de los golpes del certamen continental.
Scaloni logró revivir en Brasil luego del 2-0 de su equipo a Qatar en Porto Alegre. Ese resultado, más la derrota de Paraguay contra Colombia, posicionaron a Argentina en el segundo lugar del Grupo B que le permitió evitar a Brasil en el primer cruce directo. El entrenador de la Albiceleste pareció haber encontrado su tridente ofensivo (Messi, Kun Agüero y Lautaro), pero aún debe fortalecer la zona media y defensiva. Donde sí tendrá la ventaja es en la grada, donde se espera al menos 30.000 argentinos.
En la vereda venezolana todo es ilusión, la propia de un equipo que tiene muchos jóvenes que están llenos de hambre de gloria. Los de Dudamel se encomiendan a repetir ese notable nivel mostrado en Madrid en marzo, cuando vencieron 3-1 a Argentina en el Wanda Metropolitano que coreó olé. En esta Copa América están invictos y cuentan con uno de los mejores porteros del torneo, Fariñez, que sólo encajó un gol. Él y su infranqueable defensa quieren borrar a Messi de esa nueva copa de la que habló el domingo pasado. «Hay que aprovecharla», dijo Leo. ¿Lo podrá hacer?
De Paul, el socio del alma de Messi en la selección albiceleste
Si Leo Messi no está con Kun Agüero, Otamendi o Di María, está con Rodrigo De Paul. El volante del Udinese creó en este torneo una excelente relación con el ’10′ que se nota en todos los entrenamientos de Argentina en Brasil. En el centro de entrenamientos del Fluminense, por ejemplo, ambos no dejaron de hablar un minuto mientras realizaban los ejercicios de calentamiento. La sonrisa de Messi mientras ‘Rodri’ le hablaba era evidente. El capitán disfruta en esta Selección y, si él está feliz, todo puede ser mucho más fácil para Argentina.