Molestias por retraso en cirugías, falta de atención en emergencia y por escasez de reactivos para exámenes se reportan en el hospital del IESS Los Ceibos
Familiares de enfermos piden que se dé atención oportuna y que se dé información.
Más de 20 horas con dolor y molestia tuvo que padecer Narcisa, de 70 años, con una fractura en su hombro. Ella acudió de emergencia al hospital Los Ceibos la noche del pasado lunes con una tira en que trataba de sostener su brazo. Esa se la habían colocado en el hospital del IESS de Durán, cantón donde reside. Allí le dijeron que eso era operación y que no había insumos allí para hacerlo, por lo que la enviaban de derivación a Los Ceibos.
Allí continuó su suplicio, pues al llegar a este hospital la mujer fue revisada luego de un par de horas, se le reconfirmó que había que operarla pero le explicaron que debía seguir esperando. “Nos dijeron que hay que esperar hasta las 06:30 para ingresar los papeles y que luego hasta el mediodía seguir con la espera a que se desocupe una cama porque no había”, recordó.
“Nos dijeron que las cirugías se hacían entre 7 y 8 días, esto por la falta de insumos y además esperar que la casa comercial entregue una placa para acomodar los huesos”, comentó el hijo de la afectada.
Como el caso de esta mujer, otros con distintas complicaciones se evidencian en exteriores del hospital Los Ceibos de Guayaquil. Este hospital, de segundo nivel del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), atendió a 258.984 pacientes que comprenden 136.790 de género femenino y 122.194 de género masculino durante el 2021, según cifras en su rendición de cuentas días atrás.
En el caso de Narcisa, la mujer esperó por atención, pero el dolor pudo más y la familia no aguantó la situación y la llevaron a una clínica privada. “Gastamos más de 300 dólares, pero lograron estabilizar a mi mami, ella es una mujer mayor, no mereció ese trato que le dieron. Yo denuncié en redes sociales, hice eco porque me parece injusto que traten así a los afiliados y jubilados”, comentó el hijo de la mujer.
Otro caso que se registró fue el de Marlene. Su hija la llevó por un fuerte dolor en el vientre. Le indicaron que tenían que operarla de la vesícula. “A mi mamá le hicieron estudios, análisis. Todo lo que tenían que hacer para que ella pase a cirugía. Cosa que no fue así en ese momento. Siempre hubo una excusa de por medio: ‘falta de médicos’, ‘no dan autorización’, ‘a su mamá aún no la operan’, ‘no hay anestesiólogos’”, recordó la joven.
Sin embargo, ante la insistencia de la familia para que la operen y por preservar la vida de ella, se concretó luego de quince días la operación de su mamá. “Ya estábamos cansados de que día a día una excusa diferente. Y postergando la cirugía de mi mamá. Hasta que ayer ya la bajaron al quirófano, pero nada. Finalmente le dieron el alta. Y luego una cita de consulta externa con el cirujano y ahí se pudo concretar la operación. Ahora buscamos que se recupere”, indicó la joven que acompañó a su mamá en este proceso.
En los exteriores del servicio de emergencia, acompañantes de los enfermos esperaban alguna noticia. Juan Carlos, hijo de un paciente hipertenso, comentó que su papá de 80 años empezó a desvanecerse, temían lo peor, no obstante, lograron ingresarlo de emergencia al hospital.
“Sí nos atendieron rápido y lo único que me han pedido es que los exámenes de laboratorio los haga afuera, como aquí está cerca Interlab fuimos para allá con la muestra y nos salió como más de $ 20, no era mucho, menos mal”, dijo.
Diario El Universo, -medio de donde tomamos esta nota-, solicitó información sobre el servicio de atención de cirugías, número de pacientes y abastecimiento de insumos y medicamentos en este hospital, pero hasta el cierre de esta edición no se obtuvo respuesta. (I)
Fuente: El Universo Ec