Juez resolvió la devolución de bienes incautados que no hayan sido vendidos a los Isaías
La resolución anunciada verbalmente este martes, que deberá ser manifestada por escrito en 48 horas, fue apelada por la Procuraduría
Un juez de Guayaquil resolvió la devolución de los bienes incautados a los hermanos Roberto y William Isaías Dassum que no hayan sido enajenados (vendidos, donados o cedidos), así como la nulidad del proceso de valoración del supuesto perjuicio causado por los propietarios del extinto Filanbanco.
La Procuraduría General del Estado y otras entidades apelaron de inmediato la resolución anunciada verbalmente este martes, que deberá ser manifestada por escrito en un plazo de 48 horas.
Según la Procuraduría, la decisión del juez pretende convertir una acción de medidas de cautelares en una acción de protección favorable a los intereses de los hermanos Isaías, refugiados en Miami, Estados Unidos.
Sin embargo, Jorge Zavala Egas, abogado de los Isaías, señala: «la decisión judicial es la de reparar los daños ocasionados con el proceso de incautaciones, que fue declarado como vulnerador de derechos por parte del Comité de Derechos Humanos de Ginebra».
Y aclara que la restitución de los bienes se ordena para aquellos que no hayan sido vendidos por el Estado. «Los bienes que ya fueron enajenados o cedidos a tercerceros, esos no se ha ordenado restituir», dijo Zavala Egas esta noche a Ecuavisa.
El 8 de julio de 2008, bajo el mandato de Rafael Correa, la ahora desaparecida Agencia de Garantía de Depósitos (AGD) incautó los bienes de los Isaías con el objetivo de garantizar el pago de las acreencias a los depositantes de Filanbanco, que quebró en el feriado bancario de 1998.
Según la Procuraduría, fueron más de 200 empresas y otros bienes confiscados, entre esos constaban: Eica, importadora de maquinaria agroindustrial; el ingenio azucarero EQ2; once medios de comunicación como los canales de televisión TC, Gamavisión, TVCable y varias radios; las imprentas Maxigraf y Megagraf; la empresa de mensajería y paquetería Servientrega.
También haciendas y lujosas viviendas de los Isaías pasaron al fisco. Entre las propiedades consta una mansión ubicada en Lumbisí, nororiente de Quito, donde el correísmo instaló la Secretaría Nacional de Inteligencia (Senain), que el 21 de septiembre del 2018, por disposición del entonces presidente Lenín Moreno fue reemplazada por el Centro de Inteligencia Estratégica, como ente rector del Sistema Nacional de Inteligencia.
Otros bienes de los Isaías fueron subastados, como la colección de autos clásicos, obras de arte y pintura colonial.
En su momento, una auditoria internacional estimó en 661 millones de dólares los bienes incautados por el Estado a los hermanos Isaías, pero su defensa asegura que lo confiscado sobrepasó ese valor.
«Tenían que incautarse bienes por 661 millones de dólares, pero incautaron hasta el viento: empresas, autos, casas, haciendas, cartera por cobrar, y no hicieron jamás ningún inventario. Ahora corresponde determinar la responsabilidad del Estado», ha dicho Ricardo Noboa, también abogado de los Isaías.
El ex superintendente de bancos, Juan Falconí Puig, a quien los expropietarios de Filanbanco consideran autor intelectual de la incautación de sus bienes, ha dicho que en lugar de reclamar millones, ellos deberían devolver al país todo lo que aún deben.
«No solo que no tienen derecho alguno a un real partido por la mitad por indemnización, sino que le deben todavía al Estado ecuatoriano de tres a cinco mil millones de dólares por los créditos vinculados, que ellos se llevaron la plata, todos los dineros de los ecuatorianos que los puso el Estado a través de la AGD».
La resolución de devolverle a los Isaías lo incautado, dictada este martes en Guayaquil, contrasta con la decisión que el pasado 2 de abril tomó la jueza Andrea Patiño, de la Unidad Judicial de Durán, quien declaró sin lugar una acción de protección interpuesta por los exbanqueros.
Con dicho recurso solicitaban que se impida la enajenación de terrenos en Yaguachi, El Triunfo y Durán.
Aunque inicialmente se concedieron medidas cautelares aceptando la petición de los denunciantes, quedaron insubsistentes luego de la resolución final que rechazó el recurso planteado.
Este se presentó luego de que los Isaías demandaron al Estado por 2.000 millones de dólares, monto en el que valoran los bienes que le fueron incautados durante el gobierno de Correa.
Cuando se incautaron los bienes a los hermanos Isaías, en julio de 2008, la Asamblea Constituyente de Montecristi ratificó la validez de la resolución de la AGD.
El mandato constituyente número 13 prohibió a la justicia aceptar acciones legales en contra de esa decisión.
El caso Filanbanco se inició con el salvataje bancario de 1998, cuando se acusó a los hermanos Isaías de desviar a operaciones prohibidas el dinero entregado por el Banco Central. Su juicio duró más de dos décadas, pero finalmente en 2021, mediante un recurso extraordinario de revisión, la justicia ecuatoriana determinó que no cometieron peculado.
Fuente: Revista Vistazo Ec